martes, 29 de septiembre de 2009

Primer día...

Hace unos días fuí a una agencia que, basicamente, te llama si alguien les pide un ayudante de cocina/bar. Es decir, que no es fijo, vos decís cuándo podés y si hay algo...te llaman. Ya había sido divertido completar el formulario sobre la cantidad de experiencia que tenía en diferentes rubros como: hacer sandwiches, pelar verdura, lavar platos, etc. Había que poner puntuación de entre uno y cinco, claro que nunca bajé de 3 y hasta a veces completé con 4 ("bastante experimentado")...teniendo en cuenta que siempre uno puede utilizar la gran: "en Argentina es diferente"...y como algunos piensan que vivimos en chozas, puede ser. Todo sea por sobrevivir.

-Te podemos llamar el mismo día a la mañana. Se despidió la que me hizo la entrevista.

Y así fue cómo me desperté ayer...

-Hola, ¿podés venir a trabajar hoy?
-Sí, ¿a qué hora?
-YA. Miro el reloj...las 7.
-Bueno, ahí voy.

Emprendí mi bicicleteada bajo la lluvia, contra el viento y luchando contra las eternas subidas.

Llego e inmediatamente el encargado de la cocina, una mezcla de gorila y Vikingo GIGANTE, me pregunta:

- ¿Tenés experiencia en cocina?

Ahora es cuando el lector decide. Si usted cree que debo decir la verdad lea opción A, si cree que debo seguir por el camino oscuro de la mentira, pero que garantiza la supervivencia, lea la opción B

Opción A :

-Mirá, bueno, en realidad, me gusta cocinar, mucho no lo hago porque vivo con mis padres. Aunque, a veces miro el canal Gourmet.

Posible respuesta:

- Gracias por haber venido hasta acá, espero que la pedaleada haya sido saludable, aunque esté lloviendo. Ya podés volver a tu casa.


Opción B

- Bueno algo si, mis padres tuvieron un restaurante y los ayudaba bastante. Además, vivo solo hace varios años...la cocina es mi vida. [1]

- Bueno, acá tenés dos cajas de morrones, cortalos a la mitad y sacale lo blanco de adentro.

Así que me puse a cortar morrones, luego de 1 hora y media, y haber terminado con las dos cajas, llegó la siguiente instrucción:

-Ahora seguí con los verdes.

Ahí estaba, ya un experto morronero..otra horita (esta vez ya un poco más rápido). Termino sin ganas de tocar un solo vegetal más y me entero que también existen los morrones amarillos...otra horita más.

- Bueno, ahora..cortalos.

Horita y media cortando morrones multicolores, que por suerte, fueron sin dedo. Aunque estuve bastante cerca de perder una parte de mi huella digital en el intento de ser más rápido...no sé para qué, el resto se tomaba las cosas con tanta paz.

Así que, luego de estar 4 horas y media, ya era todo un experto acerca de cómo lavar, tratar y acicalar un morrón, y sin perder un dedo en el intento, claro.

Lo más divertido fue cuando, ya convencido de mi condena a cortar vegetales, el encargado me sorpende con:

-Ahora preparate DOS salsas, una con ajo, crema y PAPRIKA (sigo sin saber qué es), y otra QUE TE GUSTE. (???)

-Bueno.

Ahí, previa persignación, salí a jugar un River-Boca en la Bombonera y de visitante. ¿Qué hacía? Primero, a escondidas, tuve que probar la paprika para ver qué gusto tiene. Ahí nomás, cara de que está todo claro, e hicimos la salsa...algo salió. Por suerte al haberme tomado bastante tiempo para hacerla, alguien hizo la segunda que le tocaba a mi imaginación (ingenio) tratar de desarrollar..aunque siempre se puede haber implementado la: "bueno pero decime qué ingredientes tienen, para orientarme un poco" y tratar de sacar por lo menos lo que se debería utilizar.

Veremos si el viernes me vuelven a llamar..

Saludos del morronero mayne.


*La nueva extención de mi cuerpo

[1] Exagerado para crear atmósfera.

4 comentarios:

Bruno Acanfora dijo...

Este blog es una fiesta.
Estás escribiendo bien, ya estás grande.
Llevás un gran diario de viajero. Cuando vuelvas lo imprimimos y lo repartimos en las escuelas del conurbano como manual de vida.

Te mando un saludo, desde que te fuiste fui en cana dos veces.

Bruno.

Anónimo dijo...

No paré de reirme durante todo el desarrollo de la opción B, hinchado los huevos el jaso con los morrones!!!

Yo creo que podrías escribir un libro sobre morrones y cómo cortarlos, y lo difundimos por moRRon... jejejeje

Yo cai en cana por hacerle uno de estos chistes a un cana en lo de lucho ocho veces.

EL negro de la facultad

Pablo dijo...

"Nunca... decir... la verdad... ni anunciar... que... vivo...con... mis... padres" Listo, anotado.

Me cagué de la risa, Jaso. Seguí así que tu experiencia ya masticada nos sirve a todos

Anónimo dijo...

jaja, muy bueno!!! enseñanza para la vida: los morrones son los rojos, los otros son ajíes verdes y amarillos (¡me cago en la diferencia!, pero ya que vas a dedicar tu vida a los morrones, no está de más saberlo!). jaja, muy divertido el blog, abrazo grande,

Bicho.